Día 15 de agosto de 2009
Tras levantarnos bajamos la torre en la que habíamos pasado la noche y ante nuestro ojos de dispuso un auténtico festín en forma de desayuno.Cereales, fruta, embutidos, tomate, queso, pepino, varios tipos de pan, zumo, leche y café. Después de un desayuno impropio de un albergue juvenil nos ponemos en marcha. El comienzo como todo es muy entusiasta, con un ritmo bastante alto.Pero tras la parada para arreglar la cadena de Eddie nuestro ritmo de pedalada bajó notablemente. Los paisajes son verdaderamente espectaculares y el carril bici va literalmente acompañando al Danubio.
Cerca de la frontera con Austria probé un pastel de Apfelstrudel, muy rico. A la hora de la cena tomé un plato por 7,50 que consistía en dos rodajas de redondo de cerdo, una ensalada de col con vinagre y una especie de pastel extraño con salsita.Sin más.
No hemos conseguido llegar hasta linz pero nos hemos quedado a unos 10 km por lo que haremos esa distancia mañana.
Austria es muy parecida a Alemania, sus mujeres son igualmente bonitas aunque la gente es muy seria.
" Se viaja no para buscar el destino sino para huir de donde se parte" M.de Unamuno
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